Whole Kitchen en su propuesta salada para el mes de Noviembre nos invita preparar un clásico italiano "Ciabatta"
Segundo mes y segundo reto para mí con Whole Kitchen. Si en el mes de Octubre ya nos invitaron a preparar un plato contundente como el coq au vin para los fríos que se avecinaban, este mes a tocado encender el horno para entrar en calor.
He de confesar que cuando vi la propuesta me dio un poco de vértigo cocineril ¿PAN? Maremiadelamorhermoso si nunca he hecho pan... ¡ajá! ¡He ahí el reto, pequeña!
Si es verdad que he hecho infinidad de veces masa de pizza, bizcochos, magdalenas, etc, pero pan nunca. Y quieras que no me daba un poco de respeto, y más después de mirar multitud de recetas en las que coincidía siempre la idea de que la masa del pan ciabatta es difícil de manejar, un tanto pegajosa debido a la humedad y que hay que manipular con mucha suavidad para no romper las burbujas de aire que hacen que la masa adquiera esa textura (como si acariciases un bebé, dicen los italianos).
A si que me puse manos a la masa, y al final salió un pan chapata, que para ser el primero, creo que no está nada mal. Eso sí, en el proceso estuve un par de veces al borde del desquicie porque la masa tiene vida propia, y así pasó, que al final acabó con una forma un poco irregular. Pero teniendo en cuenta que "ciabatta" significa literalmente zapatilla, igual no estaba tan desencaminado mi pan y hacía honor a su nombre, eso sí, zapatilla del número 50 por lo menos.
De nuevo he seguido al pie de la letra la receta que nos facilitaron porque debido a mi desconocimiento en el tema panes no me veía suelta para innovar, aunque una vez hecho y viendo que tampoco era la cosa tan difícil, pensé que la próxima vez que lo vuelva a repetir, seguramente haré alguna chapata aromatizada con tomillo, romero y orégano, creo que podría estar bien.
Las cantidades que utilicé fueron la mitad de las que aparecían en la receta que nos facilitaron, dado que en parte era experimento, por si acaso no salía bien, decidí hacer menos cantidad por si había que repetir la jugada. Gracias a la providencia divina el pan no fue directo a la basura, se podía comer, es más, no duró ni 5 minutos, y aunque las cantidades estaban divididas, salió un buen panazo.
Para preparar un pan ciabatta o chapata para dos personas vamos a necesitar:
Para la masa madre:
Para la masa restante:
Para empezar, preparamos la masa madre. En un bol ponemos el agua y la leche un poco templadas, y disolvemos la levadura. Pasados 5 minutos añadimos la miel, disolvemos bien, y añadimos seguidamente la harina, mezclamos hasta que se disuelvan todos los grumos. Nos quedará una masa bastante líquida. Tapamos con un paño y dejamos fermentar durante al menos 12 horas. Yo lo dejé toda la noche, algo más de 12 horas.
Transcurrido este tiempo, ponemos en un cuenco pequeño un poco de agua templada y disolvemos la levadura, dejamos reposar 5 minutos, y la añadimos al bol en el que tenemos reservada la masa madre. Añadimos también el aceite y mezclamos.
Seguidamente añadimos la harina, la sal y el resto de agua, y con ayuda de un cucharón de madera batimos y mezclamos todo bien durante unos 5 minutos, hasta que no queden grumos y la masa quede esponjosa y empiece a separarse de las paredes del bol. Volvemos a tapar con el paño y dejamos fermentar 3 horas.
Pasadas estas tres horas, encenderemos el horno a 220ºC. En la placa de horno ponemos papel de hornear, y enharinamos bien la superficie. Con las manos bien cubiertas de harina pasaremos la masa a la placa de horno con mucho cuidado de no reventar las burbujas de aire, y le daremos (o lo intentaremos dar) a la masa una forma rectangular. Espolvoreamos la superficie del pan con harina. Dejamos reposar el pan unos 20 minutos sin tapar, antes de meterlo al horno.
Pasado este tiempo, introducimos la placa con la masa de pan en el horno, y dejamos unos 30 minutos hasta que comience a dorarse la corteza. Transcurrida la media hora, más o menos, sacamos el pan y lo dejamos enfriar en una rejilla.
De nuevo he seguido al pie de la letra la receta que nos facilitaron porque debido a mi desconocimiento en el tema panes no me veía suelta para innovar, aunque una vez hecho y viendo que tampoco era la cosa tan difícil, pensé que la próxima vez que lo vuelva a repetir, seguramente haré alguna chapata aromatizada con tomillo, romero y orégano, creo que podría estar bien.
Las cantidades que utilicé fueron la mitad de las que aparecían en la receta que nos facilitaron, dado que en parte era experimento, por si acaso no salía bien, decidí hacer menos cantidad por si había que repetir la jugada. Gracias a la providencia divina el pan no fue directo a la basura, se podía comer, es más, no duró ni 5 minutos, y aunque las cantidades estaban divididas, salió un buen panazo.
Para preparar un pan ciabatta o chapata para dos personas vamos a necesitar:
Para la masa madre:
- 1gr de levadura fresca
- 75 ml de agua
- 1 cucharada sopera de leche
- 1 cucharadita de miel
- 75 gr de harina de fuerza
Para la masa restante:
- 1 gr de levadura fresca
- 125 ml de agua
- 1 cucharadita de aceite de oliva
- 175 ml de harina de fuerza
- 1 pellizquito de sal
Para empezar, preparamos la masa madre. En un bol ponemos el agua y la leche un poco templadas, y disolvemos la levadura. Pasados 5 minutos añadimos la miel, disolvemos bien, y añadimos seguidamente la harina, mezclamos hasta que se disuelvan todos los grumos. Nos quedará una masa bastante líquida. Tapamos con un paño y dejamos fermentar durante al menos 12 horas. Yo lo dejé toda la noche, algo más de 12 horas.
Mi masa madre después de toda la noche fermentando |
Transcurrido este tiempo, ponemos en un cuenco pequeño un poco de agua templada y disolvemos la levadura, dejamos reposar 5 minutos, y la añadimos al bol en el que tenemos reservada la masa madre. Añadimos también el aceite y mezclamos.
Seguidamente añadimos la harina, la sal y el resto de agua, y con ayuda de un cucharón de madera batimos y mezclamos todo bien durante unos 5 minutos, hasta que no queden grumos y la masa quede esponjosa y empiece a separarse de las paredes del bol. Volvemos a tapar con el paño y dejamos fermentar 3 horas.
Pasadas estas tres horas, encenderemos el horno a 220ºC. En la placa de horno ponemos papel de hornear, y enharinamos bien la superficie. Con las manos bien cubiertas de harina pasaremos la masa a la placa de horno con mucho cuidado de no reventar las burbujas de aire, y le daremos (o lo intentaremos dar) a la masa una forma rectangular. Espolvoreamos la superficie del pan con harina. Dejamos reposar el pan unos 20 minutos sin tapar, antes de meterlo al horno.
La masa antes de entrar en el horno |
Pasado este tiempo, introducimos la placa con la masa de pan en el horno, y dejamos unos 30 minutos hasta que comience a dorarse la corteza. Transcurrida la media hora, más o menos, sacamos el pan y lo dejamos enfriar en una rejilla.
Tiene una pinta increíble
ResponderEliminarEstaba buenísima, y lo mejor de todo fue el olor a pan recién hecho que quedó en casa y que duró más que la chapata...
Eliminarummmmmmmmmh!
Me encanta la pinta que te ha sacado! Seguro que estaba buenisimo y el olor a pan de la casa... lo mejor :)
ResponderEliminar¡Gracias! Tus baguetinas son perfectas, y las tartas que haces, una maravilla, qué mano tienes!
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